Coopertoners

miércoles, 29 de diciembre de 2010

Paradojas del destino

Linda Murray tiene contradicciones desde el vamos por dos puntos. El primero es que Linda en verdad no es muy agraciada, pero tampoco se ayuda demasiado en cuestión de imagen. La segunda la citaré mas adelante. Ya en su adolescencia era muy tímida y recluida, por lo que prácticamente carecía de amistades. En la escuela tuvo mejor suerte: Fué elegida mejor alumna estatal por varios años seguidos (90-92-93 y 94) y el destino le deparo un futuro lleno de escalpelos, tijeras y cofias de cirugía. Ya fuera del círculo de sus padres alquiló su primer departamento cerca al hospital de clínicas, sobre la Avenida Córdoba. Los vecinos la recuerdan como una persona taciturna y evasiva ante la oportunidad de compartir el ascensor, prefería esperar pacientemente antes de viajar con alguien. Ante la muerte de sus padres, producto de un accidente automovilístico, su vida rotará drásticamente de curso. Alterna horas de trabajo con fatigosos estudios en dudosas academias sobre combustión esporádica humana, fenómeno poco conocido y carente todavía de fundamentos concretos de que existiese. A esta altura deja de lado la formalidad de sus prendas dando paso a túnicas de colores vivos y sandalias. Practica ayunos imposibles por semanas enteras y llega al borde de la anorexia hacia principios del nuevo milenio. Una vez recuperada y luego de varios meses de internación se inicia en el ocultismo proclamándose discípula de Aleister Crowley. Otra vez la paradoja asoma a su vida. Sin perder el trabajo, pero a modo de castigo, la derivan a trabajar en la sección estadísticas de la morgue del hospital. Lo vería como una verdadera revelación de los hijos de Aeón. No dudaría mucho en su puesto. Pasados apenas unos meses se libra una denuncia en la comisaría 19 sobre faltantes de cuerpos no identificados, NN o no reclamados a cargo del director del establecimiento. Ante la presencia policial muchos colegas no dudan en señalar sus sospechas sobre la particular compañera de guardias. Fue detenida dos días despues, en su domicilio, el 28 de Diciembre de 2006. No hizo falta demasiadas pesquizas para recolectar pruebas que la incriminaran como hurtadora de cadáveres. Con semejante espectáculo, y ante el juez de turno, fue detenida bajo los cargos de insanía seguida de canibalismo y daños materiales (Aunque se están modificando las leyes, todavía no es delito en el país el robo, la profanación y exhumación de cadáveres salvo que se pida rescate)
Linda transcurre sus días en el hospital de salud mental Braulio Moyano sin mejoras visibles. Recluída en sus visiones y creencias vive sumergida en un autismo crónico. Cuentan algunos oficiales que en el momento de su captura se le preguntó que es lo que la llevó a practicar semejante aberración, algunas de sus últimas palabras fueron: "Imposible que me culpen por comer muertos, soy vegetariana desde hace tiempo. Lo que no saben es que un hígado podrido tiene sabor a endivias..."
Tal vez no suene tan alocado. Con lo caras que estan las endivias...

lunes, 27 de diciembre de 2010

Infierno encantador

Hay un submundo que pocos ven, donde la vida no vale nada excepto que haya de por medio un par de billetes. Negocios oscuros, complicidades delictivas y personajes dignos de una novela Celinesca. Sí, esta historia también podria llamarse "Viaje al fin de la noche"
Excelente película que sin lugar a dudas será una de las favoritas para los premios Oscar. Esta en formato AVI con excelente calidad y en 1 link.
El Whisky cómprenselo ustedes.


BAJAR

jueves, 23 de diciembre de 2010

El escalofriante caso de Ed Gein


Inspiración de inspiración. Cierto es que la vida real en muchos casos supera la ficción. Cuando en el año 1960 el genial Alfred Hitchcock narro la historia de Norman Bates en "Psicosis" lo hizo junto al guionista Joseph Stéfano, quien se basó en la novela de Robert Bloch inspirada en la vida real del señor Edward Gein. Este camino lleno de nombres encontró de manera escalofriante como convertir en éxito las costumbres y quehaceres del señor Gein, quien vivió en soledad desde 1945 tras la muerte de su madre. Allí comienza una carrera de carnicería y profanación de tumbas elaborando con partes de cuerpos cortinas, máscaras, fundas, mangos de cuchillos y cuencos hechos con cráneos partidos. Al ser arrestado, entre nubes de moscas y un olor irrespirable, se le pidió que detallara a quien correspondía cada cráneo y restos de cuerpo encontrados en su cabaña: "Que yo sepa, solo he matado a Bernice Worden" Señalando a continuación que los demás restos diseminados por toda la casa eran cuerpos exhumados del cementerio de Plainfield. Macabro si se quiere, pero lo que empeora aun mas las cosas es que ya existen por todo el mundo varios club de fans. Como si con él no hubiese bastado.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

Las mellizas Garcerón


Las mellizas Irma y Julia Garcerón acostumbraban a compartir a sus novios. Cuando una de ellas se relacionaba con un caballero no tardaba en enviar a la otra como reemplazo. Bien se ve que aquí no existía metamorfosis, sino impostura.
Cierta vez, Irma se puso de novia con Andrés, uno de los trillizos Mantegari. Estos hermanos también tenían la costumbre de poseer a sus amores en común.
Por cierto, era éste un noviazgo que admitía seis formas diferentes:

1) Irma y Andrés
2) Irma y Carlos
3) Irma y Luis
4) Julia y Andrés
5) Julia y Carlos
6) Julia y Luis

No todas las fases se daban del mismo modo. Julia y Carlos se amaban tiernamente. Irma y Luis se detestaban. Carlos e Irma no se habían visto nunca.
Ni las Garcerón sospechaban de los Montegari, ni los Mantegari dudaban de las Garcerón.
Una noche Julia se casó con Luis creyendo hacerlo con Carlos. Carlos, loco de celos, estranguló a Irma, pensando que su víctima era Julia. Andrés fue condenado a prisión y Julia lo visitaba creyendo que era Carlos.
El Sr. Manuel Mandeb intentó escribir la historia de estos amores, pero apenas dejó media carilla, llena de tachaduras y rectificaciones.

Crónicas del Ángel Gris, Alejandro Dolina.

viernes, 10 de diciembre de 2010

El bar de Manolo y la Corporatocracia


Costaba creerlo. Una sensibilidad a flor de piel el Gallego Manolo. Sesenta años y gordo como bolsa de yerba Misionera. Tenía los botones tan ajustados del guardapolvo que daba la impresión de salir eyectados en cualquier momento. Jamás lo habíamos visto tan sensible. Era el dueño del bodegón "La rosa de Alcalá" en el corazón de Balvanera. No miento si digo que nos quería como los hijos que no tuvo. Nos patinábamos el sueldo en cervezas y picadas, de ahí un poco tanto afecto. Aquella noche el Tano Dinome dio el puntapié que inició el debate.
-No lo voy a entender nunca eso de los monopolios, y menos si se trata de la salud -Dijo acariciando el vaso como si fuera un hamster.
-"¿Y vos que te pensas? Esos tipos no hacen pastas para ganarse un premio Nobel papá".-Aseveró Marquitos.
-Ya se que no, pero hay pibes que se están muriendo hermano. Hacé un par de kilómetros al interior y miralo con tus propios ojos. Llegan partidas de medicamentos vencidos y para colmo insuficientes. ¡No me digas que estos condenados no pueden hacer algo! - Retrucó Dinome.
Manolo escuchaba al pasar. Iba y venía con botellas de todos los tamaños y colores. Cada vez que se acercaba a nuestro grupo se detenía unos segundos a para la oreja.
-Es así -Dije- La salud es un mercado como lo es el de la comida, la siderurgia, las empresas de transporte y los marionetistas. Los gobiernos no pueden hacer mucho al respecto con las multinacionales. Las soberanías han pasado a un segundo plano. El capitalismo salvaje tuvo cría y se llama Corporatocracia. Son ellas las que manejan los hilos de la seguridad, la democracia, la libre expresión, las guerras, el hambre, las muertes, la vida, las risas y los llantos. Ellos son dios, están en todos lados.
De repente el Gallego no aguantó mas. Dejó la bandeja en la mesa lindera y se tomó la cabeza con ambas manos.
-Es terrible -Murmuró- que todo esto suceda sin que nos diéramos cuenta. Acá tranquilo escuchando sus cosas y yo sin haberlo notado siquiera. ¡¡¡Me cago en la hostia y la putísima madre que me parió!!! ¡Joder! ¡Joder! ¡Joder!
Tratamos de calmarlo explicándole que ciertos planteos se debían debatir para tomar conciencia, que no todo estaba perdido a pesar de tan negro panorama. A veces la gente necesita un golpe de efecto para despertar del fútbol, la novela de la tarde y el aquadance.
-No te pongas así hombre, tomar conciencia nos hace mejores personas. -Lo calmó Marquitos palmeándole el hombro.
-¡A la mierda con la conciencia tío! -Bramó- ¡Los de la mesa ocho se han ido sin pagar!
Y sí, aunque cueste creerlo, a veces la susceptibilidad pasa por el lugar menos imaginado.

jueves, 9 de diciembre de 2010

Calibres, dedos y errores de apreciación.


Ni lo duden. Desde que el mundo es mundo existieron los veletas. Antepenúltimo escalón en la escala social. Cipayeros, si se me permite la expresión. Es que la gran explosión, el inicio de todo, el Big Bang en definitiva, trajo consigo ese gen nefasto que altera la conducta de algunos individuos haciéndoles crecer el dedo índice apenas unos milímetros mas de lo normal. A simple vista resulta casi imposible percibirlo. Pero tampoco hay que paranoiquearse en demasía, solo basta llevar consigo un calibre para medir falanges a las que suponemos inquisidoras. El tema es cómo comprobar a ciencia cierta si el nuevo compañero de trabajo o el remisero del barrio es un doble espía sin caer en errores difíciles de subsanar. Muy simple, es cuestión de preguntar banalidades como en dónde está la máquina de café, la calle tal o donde se comen los mejores morcipanes de Buenos Aires. Si el tipo arguye conocimiento señalando insistentemente con el dedo, estamos ante un posible delator en potencia. Ahí si, sin medir agua va usted saca el socotroco milimétrico y se lo zampa en el dedo. Este equivocado o no siempre va a ser mejor que lo que le pasó al Turco Morel, que ante el desprevenido pedido de auxilio por parte de una anciana que lo tomó del brazo señalándole la vereda de enfrente el bestia terminó por partirle el zapallo a puro bastonazo.
Por lo general estas teorías conllevan muy a menudo a errores de apreciación. Gracias a dios no la mató y con viento a favor queda libre en dos días.
Fuerza Turquito. Mientras tanto seguiremos tratando de reafirmar nuestras hipótesis al respecto.

martes, 7 de diciembre de 2010

Microficciones II


Carlitos Cabulé era un tipo de suerte. Dicen los que lo conocieron que se jugó todo lo que tenía a su alcance apostando al 17. Tenía un modo muy particular al detallar, con los productos que ofrecía en su comercio, las derrotas cabalísticas. "Anoche me jugué 12 kilos de asado, 20 ruedas de morcilla, 23 chorizos y 6 kilos de molleja, pero las del lóbulo inferior del timo que son las mas caras eh..."
No eran extrañas las ocasiones en que aquel comercio de carne, por lo general los Sábados a la mañana, se exhibieran solamente un par de bolsas de carbón o alguna que otra entraña de dudosa caducidad. Así y todo siguió firme con el 17, augurándole mas dolores de cabeza que placenteros pases de ocio.
La última noche que lo vieron, mas precisamente un día después de haber sido rematado su negocio, se emperifolló de punta en blanco y con las últimas "lingas" enfiló a todo o nada rumbo al casino flotante. "Hoy es la mía" -Lo escucharon balbucear.
Cuentan que agarró no menos de cuatro plenos con "La desgracia" y que, al salir eufórico del recinto, no pudo ver lo que se le avecinaba. Un colectivo que une a Wilde con Recoleta lo había dejado culo para arriba sin chance alguna de resurrección.
Si, el colectivo era de la línea 17. Lo que se dice un tipo con suerte.

lunes, 6 de diciembre de 2010

Microficciones


Al andar por la noche se sueña despierto. Se destraban modalidades que bajo los rayos del sol se juzgan impropias, agresivas. La noche tiende a sucumbir en sexo cuando se lo busca. Pujas de oferta - demanda y gustos de los mas variados. No anidan en ella la santa pacatería de los viejos/as que miran con recelo tanta libertad expuesta fuera de sus celdas. La carne es débil cuando los faroles iluminan el empedrado húmedo que sirve de pista para la danza mas bella que jamás halla existido. Si llueve mejor. Algunos perros a veces son testigos de la infidencia. Suenan las sirenas en busca de un cuerpo. Un cuarto explota de polvo fraudulento y no les miento si les comento que en ese momento, augurando un presagio que añoraba hace tiempo, salí en busca de lo que creía que me correspondía. Eran las tres de la madrugada y, entre pitadas profundas y pasos acelerados, me topé con lo que a mi parecer no era correspondido. "Dame todo imbécil y no me mires a los ojos" -Me dijo.
Lógico, entre tantos sueños alguna pesadilla siempre se entromete de antemano.

jueves, 2 de diciembre de 2010

El lado oscuro de la tierra


"Aquellas historias con las que me había encontrado y que habían sido como un rumor que me ayudaba a escribir; ahora eran un estruendo que me impedía escuchar mi propia voz. En los últimos meses, había oído demasiado y había visto cosas que hubiera preferido no ver".

Polo durante el capítulo "Día de cierre", El otro lado, 1993.

Cuesta encontrar tipos querendones y accesibles, mas si son famosos. Fabián fue uno de ellos. Promulgó un periodismo inusual, con entrevistados freaks, perdedores noctámbulos y hasta con tipos que se explayaban durante toda una emisión sobre cómo cazar pajaritos. Hubo programas entrañables como el de "Costita" que buscaba oro entre la mierda por los agujeros subterráneos de la ciudad. "A veces veo que la vida de ciertos tipos te deja reducido a nada" Reflexionaría mas tarde. En sus programas no había un hilo conductor. En él entraban y salían personajes de fábula, rimbombantes e hiperkinéticos en algunos casos, gente común y corriente, veletas enquistados en las entrañas de los barrios y travestis no muy femeninos en otros. Allí se exponía la corteza seca de una sociedad que siempre mostraba sus atributos mas bellos (No nos olvidemos lo que fueron los 90 en este país)
Polo fue un buceador aficionado en aguas infestadas de pirañas. Supo como nadie escuchar, pero le fue imposible asimilar esas historias que fueron hiriendo su espíritu. "No es sencillo hablar de verdad. Se viven momentos muy fuertes. Me están hablando de su vida, y yo me voy con eso adentro.Yo me voy de todos esos lugares pensando que voy a volver" Diría en una entrevista. Tuvo que hacer terapia por que no supo sacarse todos esos fantasmas que se le pegaban de las entrevistas. En una de la tantas emisiones le preguntó a un maquinista en dónde ocurrían mas suicidios: "En la estación de Santos Lugares" contestó el hombre.
Polo se quitó la vida el 3 de Diciembre de 1996 sellando su propia historia sobre las vías de aquella estación de tren. Extraña paradoja, publicaría años mas tarde a modo de homenaje la revista Sudestada, aquello que lo hacía diferente, lo iba lastimando despacio. Muy despacio.