Coopertoners

lunes, 26 de diciembre de 2011

Metrópolis


Retrofuturismo, esclavitud, sometimiento, rebeldía, revolución. Thea Von Harbou ha sabido conjugar todas esas palabras creando una de las novelas mas representativas del siglo XX. Si existe 1984 de Orwell o mismo el mediocre bolo televisivo de gran hermano, he aquí su musa inspiradora.


"Este libro no es de hoy ni del futuro. No habla de ningún lugar. No sirve a ninguna causa, partido o clase. Tiene una moraleja que se desprende de una verdad fundamental: Entre el cerebro y el músculo debe mediar el corazón".

lunes, 5 de diciembre de 2011

Que te pasa muñeca?


Un historiador de 45 años fue detenido por la policía rusa de Nizhny Novgorod por jugar con muñecas. No se trataba, claro, de pequeños ejemplares Mattel: el hombre, cuyo nombre no ha sido oficialmente revelado, de-senterraba y robaba cadáveres de mujeres que, luego, disfrazaba como muñecas para jugar con ellas.

Detenido los primeros días de noviembre, las fuerzas de seguridad calculan que el ruso llevaba ya dos años de inusuales prácticas: 24 meses que no desaprovechó en lo más mínimo. Muy por el contrario, usó su tiempo para profanar tumbas de cementerios de la zona y apropiarse de los 29 cuerpos femeninos —mujeres de entre 15 y 25 años— que la policía halló, momificados, en su residencia. En su afán coleccionista, el académico también guardaba lápidas, mapas de necrópolis y manuales... para crear muñecas.

Gracias a prácticas dignas de CSI, la policía encontró coincidencia entre las huellas digitales del historiador y las tumbas profanadas; y aunque no han querido dar a conocer su apellido, medios locales informan que se trataría de Anatoly Moskvin, un genio nacional, experto en lingüística, con dominio de 13 idiomas y especialista en la cultura celta. Mientras circulan distintas versiones, una indica que los detectives habrían descubierto su conexión con las desapariciones de los cuerpos tras visitarlo para consultarlo... dada su amplia experiencia en el tema.

Es que la fascinación de Moskvin por el asunto es vox populi. La policía se enteró de que el hombre visitó más de 750 cementerios en su vida y escribió un libro al respecto. Además indagó cómo —a los 12 años— pasó frente a un cortejo fúnebre y lo obligaron a besar el rostro de una niña fallecida, lo que disparó su pasión por la muerte. Y reveló que bebía de charcos, pasaba algunas noches en granjas abandonadas y que, incluso, había llegado a dormir en un ataúd. Lo que se dice un tipo involucrado con el morbo.

Fuente: Página/12 (Edición del 13 de Noviembre de 2011)

sábado, 3 de diciembre de 2011

En espera

Señores, el mundo no es lo que piensan. Si fue mejor es porque fue una alucinación, un deseo. Todo tiempo pasado lo fue. Que alguien explique esto, que es lo que pasa en definitiva. La Deus Machina, Doly, yo escucho música al fragor de un par de cigarros...sigo esperando la respuesta.