No lo cuenta ninguna leyenda. Alguien proveniente de alguna lejana galaxia daría que hablar. No mucho como para alcanzar la popularidad de otros grandes artistas como Freddie Mercurie o David Bowie, pero si como para ganarse el respeto de los citados. El plan extraterrestre y salvador del planeta cerró su círculo al declararse esa terrible enfermedad que asoló en los 80s. Primero fué él, después Rock Hudson, después Freddie Mercurie y después muchos tantos después. Su vida fue muy corta pero intensa, al igual que su obra con apenas tres discos. Sus videos se asemejan al film Metrópolis de Fitz Lang. Retro futurismo en estado puro con algunas pizcas de gótico y otro tanto de música clásica. Ese es el mundo que creo Klaus Sperber, mejor conocido por Klaus Nomi, mezcla rara entre Marcel Marceau y Peter Murphy. Nunca es tarde para conocer la obra de este tipo tan extraño como fascinante.
En Nueva York
Preparándose para el show
Fotografía promocional
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